El año 2025 trae consigo una serie de interrogantes sobre la evolución de los mercados mundiales. Los importantes cambios políticos en Estados Unidos, las acciones decisivas de los bancos centrales y el rápido avance de las innovaciones tecnológicas prometen un entorno dinámico que puede afectar tanto a los inversores como a las empresas. En este artículo, examinamos las tendencias y los factores previstos que pueden configurar los mercados en el año que comienza.
El año 2025 traerá consigo una serie de interrogantes sobre la evolución de los mercados mundiales.
Políticas duras del próximo presidente
El plan de Trump es reducir la inflación de inmediato, como parte de lo cual quiere implementar políticas comerciales agresivas para proteger la industria estadounidense y traer de vuelta la fabricación a EEUU. Esto incluye elevar los aranceles sobre los bienes importados a un mínimo del 10 %, con una postura especialmente dura hacia China, donde podría llegar al 60 %. La política migratoria incluye deportaciones masivas y estrictos controles fronterizos.[1]Estas medidas, sin embargo, podrían tener precisamente el efecto contrario y provocar una ralentización de la economía, una reducción de la mano de obra disponible y un aumento de los precios y la inflación. Por último, pero no por ello menos importante, la nueva política comercial podría causar problemas a las cadenas de suministro mundiales y profundizar la guerra comercial, especialmente entre Estados Unidos y China. Por otro lado, la situación se beneficiaría de un dólar más fuerte. En el frente energético, el énfasis de Trump en los combustibles fósiles y la desregulación podrían impulsar las acciones de las empresas energéticas tradicionales. La postura negativa sobre el cambio climático provocó una fuerte caída de las empresas de energías renovables tras las elecciones. La elevada demanda de centros de datos, la inteligencia artificial (IA) y los compromisos para reducir la huella de emisiones siguen siendo esperanzadores para estas empresas [1]. La relajación de la normativa en el sector financiero y la reducción del impuesto de sociedades podrían beneficiar también a otros sectores.[2]
Potencial de nuevos recortes de tipos
La Reserva.La Reserva Federal de EE.UU. (Fed) planea nuevos cambios de tipos en el nuevo año, pero serán sólo dos recortes, para un total de 50 puntos básicos, un giro de un punto porcentual respecto a los cuatro originales. Durante la última reunión de diciembre, la entidad recortó los tipos de interés hasta el 4,25 % - 4,5 %, tal y como se esperaba. El presidente de la Fed, Jerome Powell, opinó que la economía iba bien, por lo que sus próximos movimientos podrían no ser tan severos. El cambio de enfoque de la Fed respecto a futuros recortes se produjo a pesar de estimar que el PIB aumentará hasta el 2,5 % en 2025, mientras que la inflación debería mantenerse por encima del objetivo del 2 %. A la complejidad general se suman los mencionados cambios de política de Donald Trump y su posible impacto, ante lo que Powell señaló que la Fed necesita tomar decisiones cuidadosas.[3] El Banco Central Europeo (BCE) tiene un planteamiento similar, habiendo insinuado la posibilidad de nuevos recortes durante su reunión de diciembre, cuando redujo su tipo principal al 3%. Esta decisión es coherente con el enfoque del BCE basado en los datos y su compromiso de reducir la inflación al 2%, con una perspectiva de inflación revisada del 2,1% para 2025[2].[4]
La tecnología en el nuevo año
En 2025, el sector tecnológico podría continuar su transformación, moldeado en particular por la incesante demanda de inteligencia artificial. Esta se integra cada vez más en sectores que van desde la informática a la sanidad. De ahí que gigantes tecnológicos como Nvidia y Meta sigan invirtiendo fuertemente en esta tecnología. Sin embargo, esto plantea la cuestión de la rentabilidad de la inversión, pues el listón ya se ha puesto demasiado alto y cada vez es más difícil superarlo en el volumen que se hizo al principio. Con la proliferación de la IA, la ciberseguridad y el uso ético siguen siendo una prioridad absoluta, y se espera que las organizaciones inviertan tanto dinero como tiempo en protegerse contra usos indebidos, según Forbes. Las tensas relaciones entre Estados Unidos y China y los aranceles propuestos también suponen una amenaza para el sector tecnológico. Apple, por ejemplo, podría verse especialmente afectada por su dependencia de China tanto en ingresos como en producción.[5]En el caso de los semiconductores, esto interrumpiría la cadena de suministro, en particular las importaciones procedentes de Taiwán. Según la Comisión de Comercio Internacional de EE.UU., el país asiático representará hasta el 44% de las importaciones estadounidenses de chips entre 2021 y 2023. La preocupación también ha llevado a aumentar la producción para garantizar el suministro y a advertir a algunas empresas de que sus ventas disminuirán.[6]
Se espera que los índices suban
El año 2024 representó un año de crecimiento para los índices bursátiles de EE.UU con varios récords alcanzados. La inteligencia artificial, que ha impulsado el sector tecnológico, y los tipos de interés más bajos han contribuido en gran medida a la fortaleza. Estas razones deberían seguir apoyando el impulso en 2025, según el portal Quartz. A ellas se suman las políticas propuestas a favor de las empresas, de las que el mercado bursátil puede seguir beneficiándose.[7] Varios bancos de inversión también hablan de crecimiento, con previsiones para 2025 que oscilan entre los 6.400 y los 7.100 puntos, según Yahoo Finance [3].[8]
Materias primas
El sentimiento de cautela en el mercado del petróleo se refleja en los precios para el nuevo año fijados por los analistas en una encuesta de Reuters de noviembre. Esperan que el precio medio del crudo Brent se sitúe en 74,53 dólares y el del crudo WTI en 70,69 dólares por barril [4]. Mientras tanto, estas cifras muestran un descenso del valor por séptimo mes consecutivo. Esta previsión se debe a una combinación de factores, entre ellos el menor crecimiento de la demanda mundial y los amplios niveles de oferta. Se espera que la OPEP+ mantenga sus actuales recortes de producción al menos hasta el primer trimestre de 2025. Los factores geopolíticos, como el endurecimiento de las sanciones estadounidenses a Irán o las tensiones en Oriente Próximo y Ucrania, podrían apoyar los precios a corto plazo.[9] En cuanto al oro, el Consejo Mundial del Oro prevé que, a pesar de los máximos históricos y el mayor rendimiento anual en una década, el crecimiento podría moderarse en 2024. La razón, según el consejo, podría ser una inversión de la política de recortes de tipos de la Reserva Federal, lo que frenaría la demanda del metal precioso. Por otra parte, sin embargo, las compras de los bancos centrales y el posible aumento de la demanda china podrían seguir ofreciendo potencial alcista. Las actuales tensiones geopolíticas y la incertidumbre económica podrían impulsar a los inversores de nuevo hacia el oro, preservando su condición de refugio seguro.[10]Las estimaciones sugieren que el precio del metal precioso podría alcanzar los 3.000 dólares [5].
Conclusión
El año 2025 podría ser un año de importantes cambios y oportunidades. Aunque las reformas políticas y los cambios en la política monetaria traen incertidumbre, las innovaciones tecnológicas, en particular las asociadas a la inteligencia artificial, pueden aportar potencial. Los inversores deberán prestar mucha atención a los riesgos políticos, las señales macroeconómicas y las tendencias tecnológicas. Independientemente de los retos, la adaptación temprana y la diversificación siguen siendo estrategias clave para invertir con éxito[6].
Adam Austera, Analista Principal en Ozios
[1,2,3,4,5,6] Las declaraciones prospectivas se basan en suposiciones y expectativas actuales, que pueden ser inexactas, o en el entorno económico actual, que puede cambiar. Tales afirmaciones no son garantía de resultados futuros. Implican riesgos y otras incertidumbres difíciles de predecir. Los resultados pueden diferir materialmente de los expresados o implícitos en cualquier declaración prospectiva.
[1] https://www.bbc.com/news/articles/ced961egp65o
[2] https://finance.yahoo.com/news/whats-ahead-markets-2025-according-100000833.html
[3] https://www.cnbc.com/2024/12/18/fed-rate-decision-december-2024-.html
[4] https://www.morningstar.co.uk/uk/news/258373/ecb-cuts-rates-as-expected-lowers-inflation-growth-outlook-.aspx
[5] https://www.cmswire.com/digital-experience/trade-war-tariffs-how-a-trump-election-would-change-tech/
[6] https://www.forbes.com/sites/timbajarin/2024/12/03/five-major-concerns-for-tech-industry-in-2025/
[7] https://qz.com/2025-stock-market-predictions-analyst-sp500-djia-nasdaq-1851713886
[8] https://finance.yahoo.com/news/wall-street-issues-its-most-bullish-2025-sp-500-target-yet-144625166.html
[9] https://oilprice.com/Latest-Energy-News/World-News/Analysts-Cut-2025-Oil-Price-Forecasts-Again.html
[10] https://www.investopedia.com/gold-set-for-much-more-modest-growth-in-2025-says-world-gold-council-8760468