Mientras el mundo financiero observa con impaciencia una de las OPV más esperadas de la industria tecnológica, Arm Holdings, proliferan las especulaciones sobre sus posibles implicaciones. Arm, renombrada empresa de semiconductores y desarrollo de software, está a punto de entrar en una nueva fase que puede redibujar el mapa de las inversiones en el sector tecnológico y repercutir en la industria en su conjunto. Este análisis pretende nombrar los factores clave asociados a la inminente salida a bolsa de la empresa y sus implicaciones más amplias dentro del sector tecnológico.
Acerca de Arm Holdings
Arm Holdings, un nombre mundialmente reconocido en la industria tecnológica, es una empresa pionera en el desarrollo de semiconductores y software. Fundada en 1990 y con sede en Cambridge (Inglaterra), Arm ha desempeñado un papel clave en la configuración del mundo informático moderno. Su actividad principal es el desarrollo de procesadores (CPU) Arm, que se han convertido en parte integrante de una amplia gama de dispositivos, desde teléfonos inteligentes y tabletas hasta sistemas embebidos. La revolucionaria contribución de Arm va más allá de las CPU e incluye el desarrollo de chips avanzados y herramientas de desarrollo de software. Con un enfoque coherente de la innovación, la empresa sigue ampliando los límites tecnológicos y haciendo evolucionar los sistemas y dispositivos informáticos que impulsan nuestro mundo conectado.
Una de las señas de identidad de la empresa es su apuesta por el diseño eficiente y el ahorro de energía. Este enfoque hace que los procesadores Arm sean especialmente adecuados para dispositivos móviles en los que la duración de la batería y el rendimiento son factores críticos. Como resultado, los procesadores basados en Arm se han convertido en una fuerza dominante en el mercado de los sistemas móviles e integrados. En 2016, SoftBank Group aprovechó la posición clave de Arm en el mercado y se convirtió en el nuevo propietario de la empresa.
La OPV pondrá a prueba la IA de SoftBank
Mientras el fabricante de chips Arm, propiedad del grupo SoftBank, se prepara para su salida a bolsa en el mercado Nasdaq estadounidense, los inversores se plantean dos preguntas a la vez: ¿será el crecimiento de la empresa realmente exponencial, como afirma Masayoshi Son, consejero delegado de SoftBank, y estará impulsado por el crecimiento explosivo del segmento de la inteligencia artificial (IA)? Son ha hecho de Arm la pieza central de la cartera de inversiones tecnológicas de SoftBank, subrayando únicamente su papel clave en la IA. Considera a Arm parte central de un grupo de empresas de IA que crean sinergias entre sí, sugiriendo que hasta el 85% de los activos de SoftBank están formados por empresas extranjeras que hacen negocios en IA. A pesar de estas afirmaciones, los escépticos señalan que en realidad Arm puede ser un actor de apoyo más que uno de los principales en IA. Aunque se espera que la OPV ofrezca más respuestas sobre la estrategia global de SoftBank en IA, analistas y expertos siguen mostrándose cautos sobre el impacto real de Arm en el segmento de la IA y la posible interacción dentro de la cartera de SoftBank.[1]
Muchas grandes empresas están interesadas en Arm
Arm Holdings se enfrenta a un dilema, ya que sus principales clientes, incluidos gigantes tecnológicos como Apple, Amazon, Intel, Nvidia, Alphabet, Microsoft, Samsung Electronics y TSMC, compiten por una parte de su próxima oferta pública inicial. Esta batalla por las acciones de la OPV es una prueba del compromiso de la empresa por mantenerse independiente dentro del sector de los chips.
El interés por adquirir una participación en una empresa a través de una OPV obedece a su intención de estrechar lazos comerciales y evitar que sus competidores adquieran ventaja en el mercado. Los semiconductores de Arm son un producto clave para más de 260 empresas tecnológicas, que producen más de 30.000 millones de chips al año y alimentan una amplia gama de dispositivos electrónicos. Aunque la inversión en la OPV no les otorgue puestos en el consejo de administración ni control estratégico, podría reforzar su relación con la empresa y frustrar así posibles adquisiciones futuras de la compañía por parte de competidores. Arm y su propietario, SoftBank Group, han reservado un total del 10% de las acciones de la OPV para sus clientes tecnológicos, resistiendo a las presiones para que se asignen mayores cantidades a fin de mantener la liquidez de las acciones. La noticia de que casi todas las grandes empresas tecnológicas desean adquirir una participación en las acciones de Arm es un buen augurio para Arm y SoftBank.
Visión general de las acciones de SoftBank
Las acciones de SoftBank salieron a bolsa en enero de 2000 a un precio ligeramente inferior a 13.000 yenes. Tras salir al mercado, se produjo un gran salto de cerca del 140%, pero a éste siguió una caída inmediata. Desde su caída, la acción ha cotizado en torno a los 300 JPY. Sólo ahora, en los últimos meses, el precio por acción ha subido hasta los 6.600 yenes, pero sigue siendo casi un 50% más bajo que al principio de su cotización. *

Evolución de las acciones de SoftBank en los últimos cinco años. (Fuente: Google Finance) *
El precio está en yenes japoneses. En el momento de escribir estas líneas, el tipo de cambio era de 1 USD = 145,59 JPY.
Conclusión
Como ya se ha mencionado, cuando se puede atraer el interés de gigantes como Apple, Amazon y otros, no son más que buenas noticias para ambas empresas. Esperamos que si la OPV tiene éxito, también podría tener un impacto positivo en las propias acciones de SoftBank. Sin embargo, tendremos que esperar algún tiempo para confirmar nuestra predicción -- hasta que se anuncie oficialmente la OPV. No obstante, ambas empresas -Arm y SoftBank- parecen muy atractivas por sus planes e ideas de innovación.
Adam Austera, analista principal de Ozios
* Los resultados pasados no garantizan los futuros
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[1] Las declaraciones prospectivas se basan en suposiciones y expectativas actuales, que pueden ser inexactas o basarse en el entorno económico actual, que puede cambiar. Tales afirmaciones no garantizan resultados futuros. Implican riesgos y otras incertidumbres difíciles de predecir. Los resultados pueden diferir materialmente de los expresados o implícitos en cualquier declaración prospectiva.
[1] https://www.reuters.com/technology/arm-ipo-put-softbanks-ai-hard-sell-test-2023-08-21/